Esta fotografía que puedes ver es la imagen de Lucía, madre de dos niños (mi joya y mi ángel). Parto de la base de que la historia de uno mismo la hace la propia persona y, en este sentido, siempre he querido transmitir mis experiencias a través de las joyas, como forma de expresión.

El deseo de expresar hacia afuera aquello que se siente desde muy dentro es otro de los pilares de Lucía. A través de la creación de cada pieza, he podido plasmar vivencias de estos últimos años, los más importantes en mi vida. Mis diseños, mi obra, contienen la expresión de mis sentimientos.

La inspiración ha querido encontrarse conmigo siendo deBrizuela un proyecto personal cuyo propósito es aproximar mis creaciones teniendo en cuenta dos valores: el primero es el valor intrínseco, el personal, el deseo de compartir aquello que se desea, y el segundo es la consumación del deseo, que no es más que el encuentro con aquellas personas que aceptan y que creen en el proyecto de compartir ideas, en este caso a través del arte.

Con esta fotografía quiero enseñar un poco de mí, y transmitir el cariño con el que hago las piezas; espero lograr transmitirlo.